Russell Crowe - "¿Y si come más qué?"




Jon Bon Jovi y Russell Crowe (2010)

 Desde hace ya varios meses, incluso antes del estreno del Robin Hood de Ridley Scott, he estado leyendo en diversas páginas, ya sean Blog’s, Web’s o revistas de cine, frases como “El zampabollos de Russell Crowe”, “Los kilitos de más de este hombre…”, “¿Russell Crowe se ha comido a Russell Crowe?” y un largísimo etcétera. El otro día no pude aguantar más, estaba leyendo la crítica de CINEMANÍA de Los próximos tres días, la última película de Crowe que se estrena el próximo 5 de Enero, y después de leer por enésima vez la frase del zampabollos me dije que tenía que escribir sobre esto.

Estoy segura de que fuese quien fuese el protagonista de este "cambio" habría sido tema del momento, hay páginas que buscan el cotilleo y los reportajes fáciles y de este modo los consiguen. Pero le ha tocado a Russell Crowe y por activa o por pasiva le están dejando hecho unos zorros. No niego que su físico haya decaído algo en los últimos años, si se le recuerda como Máximo Décimo Meridio, el hombre que nos enamoró en Gladiador es obvio que se notará el cambio. Pero, ¿y qué? Por el simple hecho de que una persona coma más o menos, haya engordado un poco o mucho, ¿hace falta discrepar de esa manera contra ella en cada oportunidad que se tiene? Desde que salieron las primeras imágenes haciendo mención a esto no he encontrado ni un solo artículo que no dedique unas líneas a este tema y que quieren que les diga… Es muy triste. Cuando Ridley Scott le llamó y le propuso ser el Robin Hood del siglo XXI, Russell cogió las deportivas, y con valentía y fuerza de voluntad logró disminuir su peso para dar una buena imagen en el rodaje. Parece que algo había cambiado pero no, la etiqueta de gordinflón que se come todo lo que ve ya era suya y creo que por mucho que haga será difícil que se deshaga de ella.

Yo no puedo hacer nada por cambiarlo, simplemente puedo escribir dejando patente mi indignación. Pero estar leyendo una revista de prestigio como CINEMANÍA y encontrarse en medio de una crítica un insulto ¡al físico de una persona! es más que patético. Seguramente a Russell le dé igual todo esto y hace bien en reaccionar así, pero a sus admiradores y a cualquier persona con un tanto de sensibilidad y tacto esto le parecerá humillante. No hace falta que recuerde lo que este hombre ha hecho por la industria del cine, no hace falta que recuerde el grandísimo actor que está hecho, por Una mente maravillosa, por Gladiator, por El tren de las 3:10, y ni por esas, sea o no buen actor (que en este caso sí lo es) lo que están haciendo hacia su persona es denunciable. Y desde este humilde Blog ya he puesto mi granito de arena y sí, daré mi apoyo a Russell Crowe en cada momento que lo necesite, porque ha demostrado que se lo merece y también iré estas navidades a ver Los próximos tres días y con o sin peso disfrutaré de su calidad interpretativa.