Las crónicas de Narnia: La travesía del Viajero del Alba - "Narnia vuelve a ser lo que era"

Narnia regresa con una aventura épica de las buenas

Cuando llegó a las grandes pantallas la primera entrega de esta exitosa saga juvenil muchos no imaginaron la madurez que adquiriría con el paso de los años. Maltratada por el tiempo y pasándose por el pito del sereno los libros de C.S. Lewis Las crónicas de Narnia ha conseguido llegar a lo más alto de las taquillas en las tres entregas que hemos visto de ella. Posiblemente el olvidado primer libro El sobrino del mago que cuenta los orígenes de Narnia llegue cuando se proyecten las dos próximas películas basadas en La silla de plata y La última batalla, situación similar a lo que está ocurriendo con El señor de los anillos y El Hobbit, pero lo que es un hecho es que no han sido demasiado fieles al orden que estableciera su creador, cosa que ha podido molestar a algunos fans tanto de los libros como de las películas.

Después de Las crónicas de Narnia: El príncipe de Caspián la mayoría había perdido las esperanzas, podría haber ocurrido lo mismo que con La brújula dorada, deseamos que no, porque había una gran historia por contar y sería una lástima desaprovecharla de esa manera. Afortunadamente con esta secuela la saga ha remontado ya que La travesía del Viajero del Alba nos recuerda al maravilloso ambiente épico de El león, la bruja y el armario. Con Caspián (Ben Barnes) como principal atractivo emprendemos un nuevo viaje por Narnia, esta vez una travesía, un trayecto en barco de más de dos horas que en ningún momento se torna aburrido. Con la base del mencionado libro de C.S. Lewis, Edmund y Lucy reaparecen, esta vez sin sus hermanos pero sí con su primo Eustace, para encontrar las siete espadas de los siete caballeros que hace ya muchos años desaparecieron tras ser expulsados de Narnia por el rey Miraz. La película nos regala planos increíblemente bellos acompañados de un guión bastante notable para el público al que está destinado el filme, interpretaciones acordes a la edad de sus actores, con batallas continuas a cada cual más intensa y atractiva, una banda sonora que roza la perfección y un rugido intenso al cine familiar de aventuras. Posiblemente ñoña para algunos pero es innegable que Michael Apted lo hizo lo mejor posible. Final emotivo y abierto con los ojos puestos ya en Eustace y el sexto libro: La silla de plata.

Se puede dudar de la adaptación del libro que se ha hecho, había cosas de las que o no me acordaba o es que Apted se las había inventado, prefiero no averiguarlo porque sea lo que sea es una película que conquista y llena. Éxito absoluto al mantenerse ya por segunda semana consecutiva en la lista de las más taquilleras, ¿quién dijo Potter?